Hay algunos lugares que se pueden sentir. Hechizan al visitante de inmediato. Es el caso de Tetiaroa.
Santuario para aves, tortugas y todo tipo de especies marinas, Tetiaroa es venerada por los tahitianos que la consideran un lugar sagrado. Tan sagrado que antaño este atolón con playas de arena blanca y cocoteros era el lugar de vacaciones reservado para la realeza tahitiana. No resulta sorprendente que Marlon Brando se enamorase del lugar durante el rodaje del Motín a bordo en 1960 y más tarde se convirtiese en el propietario. En actualidad puedes seguir los pasos de los reyes y de las estrellas de Hollywood en un vuelo privado de 15 minutos desde Tahiti o Moorea.
Entre sus islotes, Tahuna Iti, la isla de las aves, es una reserva nacional para aves marinas, fragatas, charranes, rabijuncos, alcatraces pardos y petreles.
Al existir pocos medios para llegar hasta esta isla frágil pero protegida, que es además un santuario para las aves, la mejor forma de acceder es con un crucero de un fin de semana con salida de Papeete. La isla ha sido declarada reserva natural para regular el acceso e impulsar unas excursiones más sostenibles y responsables.
Tetiaroa alberga una de las colonias de aves más destacadas de Polinesia, con el charrán blanco, el alcatraz pardo, la fragata, el rabijunco común y sobre todo con la única colonia de charrán piquigualdo conocida en las islas de Barlovento. Las aves acuden a reproducirse en este oasis de paz inhabitado y su entorno debe ser preservado de todas las formas posibles.
Inaugurado en 2014 en el motu Onetahi, el Brando establece un nuevo modelo de alojamiento de lujo en las islas de Tahiti. Tiene un carácter único ya que es totalmente autónomo a nivel energético gracias a unos paneles solares y aceite de coco. Un elemento clave es una estación de acondicionamiento de agua marina que produce aire frío a partir del agua del océano recogida a 960 metros de profundidad. Prácticamente invisibles desde el mar, las 35 residencias se integran maravillosamente en el magnífico paisaje. Una eco-estación científica contribuye a la investigación, promoción y educación relacionada con Tetiaroa y su increíble biodiversidad. Una planta desalinizadora proporcionará agua fresca al resort, mientras que el agua de lluvia es recogida en los edificios técnicos. El resort debería se acreditado con el LEED platino, la certificación más exigente sobre el impacto medioambiental de las nuevas construcciones. Los otros islotes del atolón siguen teniendo una explotación de bajo nivel y son utilizados para la observación científica y recogida de datos.